Detalles de la empresa Teatro Municipal de Santiago

Vulneración de Derechos con el adulto mayor

La carta que escribí a la Señorita Encargada de atención al cliente. Señorita: Elisa Osorio. ¡Espero se encuentre muy bien! Debido a que UD. Es quién está a cargo de Atención al Cliente del Teatro Municipal de Santiago. Me dirijo a UD. Para relatar la terrible experiencia, que significó junto a mi esposo, por primera vez asistir al Teatro Municipal. (Yo muchos años atrás participé con mis alumnas en “Crecer Cantando”. Conozco el teatro y sé que primero están las cortinas y luego las puertas, a todas las dependencias, para ver el espectáculo. Las puertas son pequeñitas y no se ve, si uno abre la puerta sólo un poquito, para entrar). Nosotros salimos de nuestra casa aproximadamente a las 18.00 horas. Nuestro trayecto al Teatro Municipal, no debería demorar más de veinte minutos, (Vivimos en Baldomero Lillo N º1.121 Perpendicular a Independencia Altura del 1.300 aproximadamente), pero no contábamos con encontrarnos con taco en calle Independencia, luego Teatinos, (estaban dos camiones haciendo un taco espantoso, pasaban y pasaban las luces del semáforo y no avanzábamos nada), por fin, llegamos a la calle Las Agustinas, pensando que sería más rápido nuestro avance y cuan equivocados estábamos. El Tránsito no avanzaba nada. Nosotros en el vehículo con casi ataque al corazón. Llegamos por fin a calle Las Agustinas con San Antonio. Me bajo lo más rápido y hago la fila. Cuando me atienden, me dicen que tengo que ir a la segunda entrada. Vuelvo hacer otra fila, con muchas personas. Entro al hall, pinchan mis entradas, les explico que voy con mi esposo, que fue a estacionar el vehículo. Me dicen: que cuando llegue les avise. (Estacionó donde nos sugieren). Mi esposo tuvo que estacionar en el “Menos tres”, en un minuto me dicen que pase a la función o no me van a dejar entrar luego. Estábamos en esa situación, Cuando llega, mi esposo. Entra rápidamente y nos dirigimos, para entrar, y dos guardias nos cortan el paso. Y nos impiden la entrada a la función. Explique varias veces lo que nos había ocurrido. Mi esposo les hizo saber, el porqué de su demora. “Nada” era como predicar en el desierto. “Me increpaban porque yo, no entré a la función”. ¿Cómo lo iba a dejar afuera? Por primera vez habíamos comprado entradas, para asistir a una función en un lugar tan importante. Nos sentimos: tan humillados, tan degradados, tan depresivos, tan angustiados, sentimos que es una situación tan injusta. Creo que no corresponde el trato a una mujer de 66 años y a un hombre de 69 años. Criamos hijos, pagamos toda su educación, estamos ayudando con los nietos. Nunca casi nos damos un gusto. Y como casi nunca salimos a la hora de los tacos. No pensamos jamás, que nos demoraríamos tanto y perderíamos nuestras entradas, si salimos a una hora prudente. Se comenta igualmente que pese a que no ingresamos finalmente a la función nos marcaron las entradas como si hubiéramos ingresado a la función siendo que no nos lo permitieron, hecho que constituye igualmente un acto delictivo por parte del Teatro municipal apoderándose del valor de las entradas sin entregar el servicio pagado lo cual se puede corroborar con el registro audiovisual del Teatro. Se destaca que pese a que nosotros no nos dejaron entrar, siguieron entrando otros clientes a la función siendo que iban con retraso significativamente mayor que el nuestro por lo mismo se alude a una situación de discriminación hecho tipificado como delito. Bajo lo anterior esto aplica como un caso de Vulneración de Derechos y Discriminación bajo nuestra condición de adulto mayor y nuestra condición de salud con patologías crónicas que son de gravedad, mucho más aún considerando nuestras edades. Se despide atentamente: Amada del Carmen Hidalgo Olguín. Celular +56995055315 +56978450279 Devolución de dinero.(leer más)